REFERENTES

Jerónimo Parra Castaño

Presidente del Grupo Parra

«En el futuro Almería puede llegar a producir gran parte de la energía que consuma Europa»

Jerónimo Parra, presidente del Grupo Parra, en la charla que mantiene con el periodista David Baños, alaba la iniciativa de Cajamar cuando en su momento decidió volver a poner en valor la Casa de las Mariposas, escenario de ‘Almería en futuro’, un edificio abandonado por mucho tiempo y cuya recuperación y restauración ha servido para que Almería cuente con un espacio singular, un faro, una seña de identidad netamente almeriense, ejemplo y recuerdo de una etapa de su historia. Desde el mismo, el momento de la economía almeriense, las necesidades y ese futuro que más que meta es continuidad, se entremezclan en una conversación en la que el protagonismo recae en la propia entidad financiera propietaria del edificio, de la que Parra destaca «las muchas cosas buenas que ha hecho y hace en esta tierra» y en el conjunto del empresariado provincial, al que Jerónimo Parra representa también como presidente de la Cámara de Comercio de Almería.

-Se suele decir que los empresarios de Almería están hechos de otra pasta. ¿Cómo son en realidad?

Es cierto y que somos muy emprendedores, y que luchamos siempre contra las adversidades. Cuando me han preguntado por el tema de la pandemia he dicho que hemos pasado por otras también muy duras, no tanto a nivel sanitario, pero sí a nivel económico. La muestra está en que hemos convertido en la huerta de Europa una zona totalmente desértica. Quienes hemos conocido Almería, ya con cierta edad, hemos visto como la zona de Poniente era un puro desierto y muy mala para la agricultura porque había roca en la mayoría de los sitios y ahora quien ha conocido y conoce Almería ve el desarrollo. Eso es gracias al carácter emprendedor de los empresarios de Almería, que nos crecemos ante la adversidad.

Dificultades

– ¿En qué momento se encuentran las empresas almerienses?

-Ahora, en 2021, estamos con muchas dificultades en todos los aspectos.  Aun así, somos junto con Sevilla la provincia con más desarrollo económico y la mejor situada. Pero Sevilla lo tiene todo. Dispone de unas buenas comunicaciones, tiene todo lo que se puede pedir para que las empresas se desarrollen y en Almería, sin nada, nos hemos igualado a Sevilla.

– ¿Hasta cuándo va a ser eso así?

-Creo que depende mucho de nosotros. Escucho a mucha gente decir que los políticos nos tienen abandonados y es verdad, no miente quien lo dice. Gran parte de culpa la tenemos nosotros. Los almerienses nos dedicamos mucho a trabajar, algo que sabemos hacer muy bien, pero somos poco reivindicativos. En Almería no se verán grandes manifestaciones, ni huelgas… nos dedicamos a trabajar. Pero ese aspecto lo tenemos un poco dejado y tenemos que retomarlo. A mí no me gusta reivindicar la luna, sino cosas factibles, que se puedan ejecutar, no cosas raras.

– ¿Qué es lo más importante que tiene que llegar a Almería cuanto antes?

Para mi hay dos cosas importantes que necesitamos ya. Las infraestructuras, y ahí el AVE lo encabeza, y el disponer de agua, porque hay que resolver nuestros problemas hídricos. En Poniente es verdad que se están adelantando haciendo desaladoras y previniendo, pero el Levante, y yo soy del Levante, lo está pasando muy mal. En el Levante los empresarios invierten verdaderas fortunas en preparar un cultivo sin saber si lo van a poder regar. Esa incertidumbre que se crea es bestial y eso hay que solucionarlo. Jamás un agricultor debería invertir millones de euros sin saber si va a poder regar su cultivo.

Jerónimo Parra
Jerónimo Parra, gerente de Grupo Parra, durante la entrevista con David Baños, en la Casa de las Mariposas de Almería.

Agua

-¿Los problemas hídricos tienen arreglo,  cuál es la solución?

Por supuesto que sí. Los problemas hídricos tienen arreglo y hay que arreglarlos. Estamos tirando muchísima agua al mar vía trasvase, lo que es un contrasentido y, aunque entiendo que los caudales está bien que se mantengan, lo que está pasando ahora con ese intento que se ha hecho de bajar la dotación de agua del Tajo-Segura que se recibe en el Levante, que es la zona más castigada ahora mismo, es incompresible.  

-¿Qué está pasando con el Trasvase Tajo-Segura?

No se están depurando las aguas en condiciones en el transcurso del río. En el Tajo, Madrid está vertiendo de aquella manera; Castilla La Mancha está vertiendo sin depurar en condiciones… y entonces lo que pretenden hacer es diluir ese aporte que se está dando sin depurar en condiciones a base de meter más caudal de agua. Eso es una locura y lo que hay que hacer es lo que nos pide Europa desde hace mucho tiempo. Vamos a depurar todas nuestras aguas y ante todo, si es posible, reutilizarlas.

-¿Y en Almería qué tal lo estamos haciendo?

Recientemente he tenido una conversación con nuestra consejera, Carmen Crespo, a la que tengo que felicitar por lo que hace ahora y si luego no es así seré el más crítico con ella. Me hizo la promesa de que todas las depuradoras que están obsoletas se iban a poner en marcha, a proyectar y solucionar el problema y que después, en las depuradoras que se pudiera, la mayoría, se iba a montar un sistema terciario que nos permitiría reutilizar esa agua y recuperar un caudal hídrico importante, sobre todo en el Levante, donde estamos sin depuración porque la riada del 2012 rompió muchas depuradoras y desde entonces estamos sin depuración. Con ello no solamente solucionaremos el problema hídrico, sino que aparte de eso, como estamos tan cerca de la costa, daremos una mejor imagen a nuestro turismo porque al final esas aguas sin depurar van al mar, no nos podemos engañar.

-¿Y qué pasa con los trasvases?

-Nadie entiende que Portugal necesite que entren 2.000 hectómetros cúbicos de de caudal y que nosotros estemos metiendo ahora mismo 7.000, cinco mil más de los que nos exigen nuestros vecinos, mientras a nosotros nos están racaneando aquí 47 hectómetros. No entendemos como se puede verter el agua del Ebro al mar en Tarragona y luego la desalamos aquí ¿Hay una forma más cara y complicada de transportar el agua? Yo creo que no. La desalación es importantísima, aunque sea cara porque nos da tranquilidad, pero la desalación por sí sola no nos sirve porque una vez que se desala el agua los aportes de nutrientes que hay que meterle se dispararían y porque la desalación por sí sola no sería rentable.

Jerónimo Parra
«Hace 35 años vi que el medio ambiente era el futuro, que no se podía seguir generando vertederos»

El año en la provincia

-Estamos en un año que nadie esperaba. ¿Cómo se ha sobrellevado por la provincia?

-En Almería hemos tenido, dentro de lo que cabe, la gran suerte de tener un sector que apenas ha sufrido, el agrícola. En contrapartida, el sector turístico que lo ha pasado y está pasando muy mal. Gracias a esa agricultura tan importante, en la necesidad que había de que no faltara la comida en Europa, en eso Almería, su balanza, no ha sido tan mala como en otras provincia o comunidades autónomas que dependen cien por cien del turismo. En Almería lo hemos conllevado un poquito mejor, pero es verdad que hay muchos sectores que dependen de forma indirecta del turismo, muchísima industria que vive alrededor de él.

-Hemos pasado crisis fuertes en Almería, ¿en la económica no está siendo la peor o todavía queda por venir parte de esa crisis?

-A nosotros nos vino la crisis del 2008 en un momento de expansión de nuestra provincia. Antes de 2008 Almería estaba muy poquito desarrollada en cuanto a vivienda y hoteles. Fue un palo muy gordo para la provincia porque estábamos muy centrados en un sector que cayó. Veníamos de una inversión importante por los Juegos Mediterráneos y eso se paralizó de golpe e hizo mucho daño. Pero nada se puede comparar con esta pandemia que ha afectado a la salud. Recuerdo también la crisis del 92, que fue muy dura. En nuestro sector nadie pensó que esas obras eran de dos, o tres años… y cuando estábamos recuperándonos nos llega el 2008 y ahora la COVID.

Su empresa

-Construcción, obra pública, civil, proyectos energéticos, movimientos de tierras… el Grupo Parra se mueve hoy en muchos campos ¿Cómo lo ha hecho para llegar hasta aquí?

Me hice cargo de una empresa familiar con dos tractores que se dedicaban principalmente a la transformación de fincas agrícolas. Era el mayor de cuatro hermanos y tuve que tomar la decisión de seguir con ese negocio o dedicarme a otra cosa. Aposté por él y, siempre con el apoyo y experiencia de mi padre, empecé a crecer, a intentar buscarme nuevos nichos de mercado, y empecé a diversificar porque no podía depender solo de la maquinaria. Obra pública, energías renovables, parques eólicos, parques solares, con una sociedad específica para eso y todo el tema medioambiental.

-¿Usted vio venir el peso que iba a tener el medioambiente hace mucho tiempo?

-Hace 35 años vi que el medio ambiente era el futuro, que no se podía seguir generando vertederos. Lo que hoy vemos en países subdesarrollados, de tirar la basura que termina en los ríos y en el mar, eso pasaba aquí. Lo que está pasando ahora mismo hace 35 años que ya sabía que había que apostar por ese sector.

– ¿En la llamada de la sostenibilidad hay negocio?

-Por supuesto. Hay todavía muchos que no son capaces de verlo. Si nos acercamos a un vertedero: basura, plásticos, papel, acero… reciclamos, en el mejor de los casos, un 10%, lo demás se entierra. La famosa economía circular, hace tiempo que estoy machacando con ese tema, ese es el futuro. Cada vez hay menos materias primas en el mundo.

-¿Cómo se imagina Almería dentro de cinco o diez años?

Me imagino su tejido empresarial creciendo en la agricultura, siendo cada vez más sostenible y mejorando la forma de competir con otros países, sacando los productos con menos coste a toda Europa, vía AVE. Imagino a los agricultores de Almería sin miedo porque tienen asegurada el agua. Me la imagino reciclando un porcentaje mucho mayor de lo que hacemos ahora y produciendo la mayor parte de la energía de Europa, porque tenemos el petróleo del futuro, que es el sol. No nos cuesta nada, aunque han querido ponerle un impuesto. Las energías renovables avanzan a pasos agigantados. Cuando salió el primer coche eléctrico mucha gente no creía en él. Ahora yo tengo uno con 360 kilómetros de autonomía, cada vez hay más electrineras que están creciendo. Yo no tengo problemas para moverme por Almería con él y, además, el combustible lo produzco en mi empresa. Para los próximos cinco años veo una Almería mejor en todos los sentidos.