Alberto Cerezuela
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Alberto Cerezuela
Director de Editorial Círculo Rojo
«Cuando podamos hacer vida normal vamos a consumir todavía más cultura»
Almería en futuro aborda, desde la Casa de las Mariposas de Cajamar, una nueva conversación del ciclo en el que el periodista David Baños plantea una serie de cuestiones a Alberto Cerezuela, director de Editorial Círculo Rojo, una empresa dedicada a la autoedición y que, a su manera, ha revolucionado la cultura provincial en la que lleva años abriendo puertas a los creadores de historias y expositores de sentimientos a quienes, además, augura un futuro optimista una vez que desaparezcan las actuales condiciones que marca la pandemia. En el diálogo mantenido se plantean diversas cuestiones, se habla del sector, de cómo se ha planteado la nueva situación, de los autores y su necesidad de expresarse, de la forma en que se ha variado el ejercicio de conexión con los lectores y del presente y futuro cultural de una provincia como Almería que en este ámbito tiene muchas más cosas de las que muchos piensan.
– ¿Cómo lleva este año duro y largo?
A nivel personal la verdad es que no me puedo quejar. Dentro de lo que cabe, por suerte la Covid no nos ha rozado la salud. A nivel de la empresa, muy contento. Se ha demostrado en el confinamiento que la lectura y los libros han ayudado a mucha gente a pasar estos días. Ya estamos lejos de la incertidumbre de las primeras semanas del encierro, en las que sí hubo momentos complicados porque no se sabía muy bien lo que ocurría ni lo que después, cuando se volviera a desconfinar, pasaría. Hubo días muy complicados que provocaron que muchos de nuestros autores nos dijeran que paráramos la edición de su libro. La gente tampoco sabía lo que iba a suceder a nivel económico y, como la edición de un libro no es un bien de primera necesidad, estábamos preocupados. Pero curiosamente, a medida que ya se fue tranquilizando la cosa y fuimos conscientes de la realidad que estábamos viviendo, empezamos a pensar en cómo vivir esta nueva normalidad y es cierto que la gente se animó a la hora de publicar y nos pasó todo lo contrario.
-Es decir, que se han provocado cambios dentro de la empresa para que esto siga funcionando.
-Sí, nosotros durante el confinamiento potenciamos mucho el e-book y tenemos un formato el ePub que es como el e-book pero mucho más profesional y mejorado que te da la posibilidad de hacer infinidad de cosas: desde vídeos, música, en fin… un sinfín de posibilidades que lo potenciamos para que ya que no se podían hacer ediciones en papel, la hacíamos en formato digital. Y si es verdad que sacamos muchos proyectos durante el confinamiento de esa forma, pero también nos dimos cuenta de que, al haber estado tantas semanas en casa, había gente que por su día a día y ritmo de vida tenía proyectos literarios a los que, por falta de tiempo, no les habían metido mano. Gente que tenía libros a medias, personas que por su trabajo tenían una idea en la cabeza, pero no tenían el tiempo necesario para desarrollarla.
Escritores
-Vamos, que a la gente le dio por escribir
-A la gente le dio por leer y también por escribir y no sólo sobre el coronavirus, que también hemos tenido bastante producción de libros sobre el tema y de todo tipo, desde científicos hasta el coronavirus explicado para niños, la música del coronavirus. Al final el escritor es una persona creativa y original que se ha sacado de la manga multitud opciones para plasmar ese tema en libro. Pero también mucha gente que le dio rienda suerta a su imaginación a la hora de escribir y claro, cuando ya se normalizó un poco la cosa, todos esos libros había que sacarlos y terminamos totalmente desbordados. Nosotros, los meses desde finales de mayo y desde junio hasta ahora hemos incrementado bastante nuestra producción y la empresa. Antes de la pandemia, en enero y febrero, en la empresa publicábamos unos 170 o 180 títulos al mes y ahora publicamos muchísimos más. Desde el verano llegamos a una media de 250-260 y en el último mes hemos publicado 330 títulos distintos. También en Navidad anduvimos un poquito por ahí.
-¿De qué escribe la gente?
-La gente sobre todo es optimista en la literatura. Pero lo cierto es que también depende un poco del género. En la poesía sí hemos notado cierto halo de pesimismo, libros relacionados con la soledad, con las reflexiones interiores quizá un poco provocado por estas situaciones, pero sobre todo hemos descubierto muchos libros positivos en todos los sentidos, desde la novela que es el género que más se edita y más se vende y sobre todos también libros de autoayuda, de motivación, sobre cómo afrontar los problemas, de incluso cómo conocernos mejor a nosotros mismos. Esos sí que han proliferado bastante y estamos descubriendo auténticos best seller en ese campo. Podemos decir que ese género está de moda.
¿Y usted, Alberto, ha tenido tiempo de sentarse a escribir, o no?
-Acababa de sacar una novela, el ‘Refugio de los invisibles’, una novela negra ambientada precisamente en Almería. Se publicó en noviembre y prácticamente pude aprovechar la Navidad en cuanto a promoción, pero tenía previsto una especie de tour por toda España para presentar esta novela. La presenté en Madrid con Javier Sierra, también en Barcelona, con Sandra Barneda. Cuando estaba en la ola de presentaciones llegó la otra ola, la de la pandemia y yo, que soy una persona que intenta siempre buscar el lado positivo dentro de lo malo, me dije vamos a pasarnos unos meses en los que el libro no va a funcionar porque no hay posibilidades de que funcione, pero voy a aprovechar para escribir la segunda parte, y no pude escribir nada durante el confinamiento, se me fue la inspiración. Me agobiaba, tengo ahora un montón de tiempo libre y no puedo, no me sale. Y aproveché para potenciar digitalmente el libro y ahora es cuando estoy retomando la segunda parte que estará seguro en las librerías después del verano.
Lectores
Pero sí se ha perdido ese contacto con el lector
Se ha perdido eso, es cierto. Círculo Rojo es una editorial de autoedición y son los propios autores son los que tiene que venderlo, en el tú a tú, haciendo presentaciones, eventos… y esto no se podía hacer, pero a cambio se ha potenciado mucho el tema on line, el estar en coloquios, videoconferencias, entrar en directo en las historias de Instagram… Hay un sinfín de posibilidades que han hecho que los escritores cubran esa necesidad y además les vaya muy bien. Nosotros tenemos muchos tipos de escritores, desde el más joven impuesto en nuevas tecnologías y mayores que por circunstancias no han tenido una formación en eso y les ha llegado tarde la ola de Internet, pero también se han esforzado en aprender, en tener otro tipo de presencia. Nosotros les hemos ayudado en crearse sus páginas, en hacerse un botón de PayPal para que pueda pagar la gente… los propios escritores son partidarios de esa conexión con los clientes.
-Volvemos a lo digital. Trabajáis en España, ¿también en Sudamérica y Estados Unidos.
Nosotros publicamos en todos los idiomas. Lo que sí es que es cierto es que el 95% de lo que hacemos es en español, tanto de autores que viven en España e hispano hablantes de cualquier parte del mundo. Tenemos mucha demanda en México, Colombia, Perú y sobre todo en Florida, donde vive un alto porcentaje de los más de 60 millones de personas que hablan español en Estados Unidos. Hemos abierto una especie de sede allí para dar servicio a los autores locales aprovechando una de nuestras ventajas fundamentales que es la distribución, Tenemos un acuerdo con Logista Libro que es la distribuidora más importante que existe en España, la de editorial Planeta, y tenemos un acuerdo en exclusiva para la autoedición. Eso es una garantía espectacular para nuestros autores y de eso se aprovechan tanto los que publican ahora mismo cuando no hay tantas posibilidades de vender, como las personas que hablan español de otros países y que quieran tener una distribución en España. Si de algo puedo presumir con Círculo Rojo es de haber sido pionero en profesionalizar la autoedición poniendo una persona especialista en cada una de las fases que tiene la edición de un libro para que ayudara al autor, que se sintiera amparado por un profesional.
Cultura
-¿De cara al futuro cree que la cultura puede ser un puntal para el desarrollo de esta provincia?
-Almería siempre ha sido una tierra de creadores y de emprendedores. Aquí se puede decir abiertamente que no lo tenemos fácil por las comunicaciones, que estamos en una esquina e incluso a nivel psicológico se dice «qué lejos está Almería». Cuando organizamos la gala de premios Círculo Rojo, a la que viene gente de toda España, al final sale la comidilla de las comunicaciones de lo lejos que estamos. Pese a eso somos un pueblo muy emprendedor en muchísimos sectores, no sólo en la agricultura de la que presumimos. Aquí tenemos grandes empresas tecnológicas, el mármol… hay muchísimos sectores que son pioneros y que están poniendo Almería a nivel nacional y mundial. En cuanto a la cultura, pasa lo mismo. Aquí hay fantásticos escritores no sólo de Círculo Rojo. Tenemos dos escritores que acaban de ganar premios nacionales muy importantes, tenemos una actriz que ha ganado un Goya… La cultura almeriense es fabulosa y lo hacemos bien y yo creo que la gente se ha dado cuenta en este tiempo, en este año que estamos pasando mal sobre todo en salud, de lo importante que son ciertas cosas, y que hay otras que no importan para nada. Cuando podamos hacer vida normal vamos a consumir todavía más cultura.
-¿Cuál sería un buen título para esta pesadilla que nos toca vivir?
– No quiero hablar de lo dramático. Yo estoy en lo positivo. Hay que reinventarse, no podemos hacer mucho más de lo que estamos haciendo hoy en día, así que tenemos que asumirlo. Deseo que nos vacunemos, que todo el mundo esté sano y que podamos seguir haciendo cosas habiendo aprendido. Soy optimista también en ese mensaje tan famoso que ha habido de que «al final esto nos hará mejores». Yo creo que lo que nos ha ocurrido nos va a potenciar. El que es bueno, optimista, buena persona y trabajador estará bien y quienes no lo sean lo van a pasar mal.